Las semanas pasaban y habíamos caído en una gran rutina. Nos veíamos en la mañana cuando desayunábamos y nos poníamos de acuerdo para la comida del almuerzo. En el almuerzo nos poníamos de acuerdo sobre la cena y en la cena sobre el desayuno. Entre comidas no nos veíamos ya que ambos nos encerrábamos en nuestras respectivas habitaciones. Yo solo entraba a la suya cuando necesitaba un libro y él solo entraba para decirme que la comida estaba lista.
Nada más que de comida hablábamos.
Parecía como si ambos hubiéramos olvidado aquellos dos días que pasaron hace dos semanas, pero yo no lo he olvidado y estoy segura de que él tampoco. Lo noto por sus ojos cuando me mira, aquellos ojos tan raros y a la vez tan hermosos demuestran muchas cosas cuando me ven, por eso evito mirarlos y me concentro en la comida. Sé que es cruel, pero es más cruel para ambos estar juntos para después separarnos cuando lleguen nuestros padres... Eso sí que dolería.
Pensaba en todo esto cuando un mensaje de texto me llega a mi teléfono celular. Sonrío al ver que es mi mejor amiga Katherine, quien se había ido de vacaciones y no había oído nada de ella en estas semanas.
¡¡AMIGA VOLVI!! ¿Sabes? Lucas organizará una fiesta hoy por mi regreso. El muy tierno e idiota me extrañaba. Va a ser gigante. ¡Tienes que venir!
Kathy
Lucas es su novio de hace un año. Los tres somos muy amigos hasta que los dos idiotas se enamoraron. No me malentiendan, me encanta que estén juntos y se amen, pero odio hacer mal tercio. Pero por otro lado necesitaba distracción y una fiesta no estaría nada de mal, además que allí no estaré sola con la parejita, sino que puedo buscar gente con la que hablar... quizá algún chico que me haga olvidar a Sergio, aunque sea por 5 minutos...
Le respondo el mensaje:
¡KATHERINE TENGO TANTO QUE CONTARTE! Obvio que iré, ven a mi casa a las 8 para arreglarnos juntas como antes, te quiero.
Lía
Eran las 5 de la tarde, por lo que Kathy llegaría en 3 horas más. Tenía tiempo para pedirle permiso a Sergio, pero estas cosas no se me dan bien. Jamás he tenido que pedirle permiso a nadie, mi madre nunca está y cuando está me dice de inmediato que sí.
Me acerco a la habitación de Sergio sin saber qué es lo que me dirá. Espero que sí.
-Sergio- le digo entrando a su habitación- ¿Puedo salir esta noche?
Él me mira impactado, pero sonríe y asiente.
-Con una condición- dice con una sonrisa maligna en sus labios y ojos- Que yo te vaya a buscar y te doy permiso solo hasta las 2 de la mañana.
Mierda. Nada podía ser tan bueno ¿verdad? Bueno, podría ser peor así que no discuto y solo me voy a mi habitación para seguir leyendo.
3 HORAS DESPUÉS.
Escucho el timbre y abro la puerta emocionada.
-KAT- le digo. Me encanta ser la única, junto con Lucas, que le digo así, me hace sentir bastante especial.
-LEE- me dice ella y nos abrazamos como si no nos hubiéramos visto en 10 años.
El tomo de la mano y la hago subir a mi habitación, pero en el camino nos encontramos con Sergio, quien se encuentra con sus lentes de lectura dispuesto a bajar al primero piso.
-Hola- dice Kathy detrás mío. - Soy Katherine, la mejor amiga de Lía.
Él la mira seria, como me miraba a mí antes y sé que se siente incómodo por la situación. Sergio, a pesar de todo, es un chico tímido.
-Sergio- dice todo serio y baja sin decir más.
Cuando me encierro en la habitación con Kathy, ella no tarda en preguntarme sobre él:
- ¿No me digas que él es tu hermanastro? - me pregunta con cara de disgusto.
Kathy odia a la gente seria. Ama estar feliz y no entiende a las personas que no lo son. No es muy empática mi amiga, pero la quiero así con todos sus defectos.
-Si- le digo- No es tan malo cuando lo conoces
Ella pone blanca los ojos, un gesto que suele hacer cuando está en desacuerdo con una persona. Lo ha hecho un millón de veces conmigo y un millón y medio más con Lucas.
-Lee- me dice con su voz reprendedora- Es un amargado y lo sabes. Tan solo con mirarlo uno se da cuenta.
-Ya te dije- le digo mientras busco un poco de ropa en mi armario- No es tan malo cuando lo conoces, solo tuvo una vida dura y lo comprendo por eso, pero eso no significa que sea malo o…
-Lianna- me dice Kathy interrumpiéndome- ¿Acaso estás defendiendo a ese tipo? Sabes que odiamos a los amargados.
- ¡Pues él no es un amargado! - le digo ya enojada por todo lo que estaba diciendo de Sergio- Y tengo que defenderlo.
Ella me queda mirando un poco. Analizándome. Nos conocemos desde que teníamos 6 años, por lo que, con solo mirarme detenidamente unos segundos, ya sabe lo que pasa, lo que siento, lo que pienso... y esta vez no es la excepción.
-Estuviste con él- me dice ella así de repente.
Ella hace un silencio, esperando mi respuesta, que le negara lo que estaba diciendo o algo, pero no le puedo mentir a mi mejor amiga.
-Fue hace dos semanas y...- dije sentándome, tomándole sus hombros y esperando la peor reacción posible- Me acosté con él, ¡Pero ya pasó! Fue una vez, nos dimos cuenta de nuestro error y no hemos hablado bien desde entonces.
Kathy dejó de hablarme por una media hora, solo intentando asimilar lo que le estaba diciendo. Mientras tanto, ambas nos vestíamos y arreglábamos en silencio. Lucas iba a pasar por nosotras en cualquier minuto y era mejor estar arregladas y listas para marchar.
Kathy se vistió con una mini falta y un top de tirantes, mientras que yo simplemente me puse unos shorts bien cortos con una playera normal que dice Welcome to my world! Now get out of here. Amo esta playera.
-Quieres decir que...- dice volviendo a escuchar la voz de mi amiga ¡Pensé que no volvería a hablarme! - Ya no eres virgen porque te metiste con tu hermanastro el cual te dejo... le patearé las bolas ahora mismo
Kathy toma un bate y se acerca a la puerta.
- ¡Yo terminé con él! - le digo fuerte, pero no tanto por si Sergio estaba en su habitación.
Ella suelta el bate y me mira con incredulidad. Yo no soy de esas chicas que tiene sexo y después se va, pensando que solo fue un buen polvo, algo que era solo por sexo. No, yo no soy así y Kathy lo sabe. Sabe que acabo de perder la virginidad con Sergio. Sabe que hay algo más profundo y, antes de que pregunte, prefiero decírselo.
-Somos hermanastros. Nuestros padres nos matarían si supieran que estamos juntos... Es algo imposible ¿Sabes? y ambos nos damos cuenta de eso, solo que por dos días lo olvidamos y simplemente pasó. Ya había habido besos, pero cuando dormimos en la misma cama, solo sucedió. Queríamos hacerlo. Lo necesitábamos. Lo hicimos. No me arrepiento de nada, lo hice porque lo quería y aun lo quiero... pero es imposible y tenemos que vivir en la realidad, no en un mundo de fantasía. Y en esta realidad, Sergio es mi hermanastro. No puedo escapar de ello. Y simplemente... le terminé.
Kathy me quedó mirando atónita. Mi amiga, aquella rubia nada tonta con ojos verdes estaba impactada por lo que le había dicho. Tenía la boca abierta y ni siquiera la cerró cuando sintió su celular vibrar. Un mensaje de Lucas supongo.
-Debemos bajar- me dice abrazándome, esa es la Kathy que conozco y quiero porque me suelta de inmediato con una sonrisa en la cara- Lucas nos está esperando abajo. ¡Es hora de divertirnos y olvidarnos de Sergio!
Ambas nos reímos y cuando bajamos Kathy le dio una sonrisa a Sergio. Éste no sabía que estaba pasando, pero también le sonrió. Le di la dirección a Sergio y con Kathy entramos en el auto para ir a la casa de Lucas y a su fiesta